La 8 y Broadway. Espero que cambie la luz. No lo suficientemente distraído como para no notar su presencia, cruzo la calle con mi mirada fija en el movimiento de sus caderas. Los dos entramos en la boca del subte. Paso de largo sin prestar atención a su mirada. Viene el N. Todos suben menos yo que espero el R y ella que duda hasta que se cierran las puertas para preguntarme, ¿ése iba hasta Lexingtong? Le ofrezco mi compañía en el R, respondiendo a su iniciativa. Se sonríe, pero cuando viene el tren se zambulle en el único asiento disponible. Me mantengo distante. Parece quedarse dormida. Llega su parada y decido cortésmente despertarla. Me bajo como por instinto. Falto de palabras, le regalo un poema de Neruda que llevo en el bolsillo. Lo lee. Sonríe. Me agradece. Me cuelgo de sus labios. Lo eché todo a perder. Doy media vuelta a esperar el próximo tren para Queens, sin evitar mirar bajo su corta pollera cuando sube las escaleras.
Océano
"Cuerpo más puro que una ola
Sal que lava la línea
y el ave lucida
volando sin raíces"
P Neruda.
7 comentarios:
el fragmento de bowles, con el que termina cielo protector de bertolucci me ronda desde hace años en la cabeza
que bueno esa afinidad
un saludo
cuántas veces más nos será dado mojarnos los pies en la luna?
gracias, ella
tal vez mas de 20
beso
gracias a vos
Hola Bertrand... ajustaré el blog que te interesó para que puedas subir tus comentarios en el otro. Sí, pronto seguiré escribiendo sobre la figura del arcana y los piratas. Me da gusto que te interese el tema. Gracias
http://esoteriapirata.blogspot.com/
se te escapan todas tigre, que te pasa?
Será que no le gustó Neruda, será que no le gustó el beso?
Mmm, no lo creo, pero seguro cuando sintió la mirada debajo de su falda se arrepintió de no volver atrás...
me parece a mi o estas desactualizado
sds
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